Arquitectura y lugares de interés de Ekaterimburgo (2021): Vyacheslav Bukharov.

Por: Marcos G. Cruz

«Le preguntó: — ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano a Mí desde la tierra clama» Génesis 4:10

Cuando palidece el suelo bautizado en nieve, el frio cede al fervor religioso de los pueblos eslavos y se acalla, ortodoxos se acaloran con los cirios de los templos y las plegarias cirílicas. Hoy es navidad en la Ekaterimburgo de Rusia, y la «Iglesia sobre la sangre» para recibir a sus fieles, es de esperar que sus puertas abra. Aquel templo se edificaría para consagrar aquella tierra que atestiguara el sacrificio cainita, que  despidiera para siempre al Zar Nicolás II y su familia, incluyendo sus más pequeños hijos, siendo así toda piedad negada. Las cúpulas son la expresión semántica de la memoria necesaria, para no incurrir en atrocidades cuando vaga la sombra de Caín, e infelizmente la maldad vuelve más que para ser memoria, una realidad consumada. La pregunta que surge en esta Navidad sería, ¿es necesario construir otra «Iglesia sobre la sangre» derramada? A todos gritos al oeste su necesidad es confirmada.

Kyiv, se alza radiante la imagen del Arcángel Miguel blandiendo su espada, considerado protector de aquellos que se han aprestado a defender Ucrania. Pero la guerra se ha extendido y el conflicto no acaba, se acumulan perdedores en una lucha donde nadie gana. La beligerancia va a trascender el uso de las armas, y una disputa bizantina gravita sobre la Navidad y su data. Epifanio I, del Patriarcado de Kyiv de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, convendría en hacer uso del calendario gregoriano, posibilitando así el uso litúrgico que occidente observara, de momento ha permitido que la fecha cuestionada, pudiera ser el 7 de enero, o el 25 de diciembre celebrada. Como menonita no es que le reste a esas diferencias importancia, sino que me importa, sin especificar calendarios o épocas, que al llegar un aniversario de vida, la persona misma lo vivenciara. J. Nelson Kraybill, que el Congreso Mundial Menonita liderara, se dirigiría a Kirill el Patriarca, expresando la preocupación y el sentir de cristianos menonitas en muy abierta carta:

«Lamentamos la violencia actual entre el pueblo de Rusia y el pueblo de Ucrania… Mientras Rusia desata armas sobre Ucrania, te pedimos como líder cristiano en Rusia que hables y actúes con valentía por el evangelio de la paz… Estás en una situación difícil, Patriarca Kirill. Los menonitas oran por ti y por todos los cristianos en Rusia y Ucrania».  (Kraybill, 2022)

Pero en la Navidad ucraniana, al toque de la balalaika, del cielo los copos de nieve caen, y compiten con la  metralla. ¿Quiénes son los antagonistas? Cristianos a veces bajo un mismo patriarca, personas de un mismo credo que entre ellos se matan. ¿Cuánta sangre noble, inútilmente derramada? Ya la nieve del suelo no es blanca, sino roja en su escarcha. ¿Cuánta sangre joven, sangre rusa y ucraniana? Habría que preguntarse si Putin merece el título, de «Príncipe de Valaquia». En una Navidad púrpura, abundan las madres enlutadas, y el icono de la Theotokos llora, como si abrazara a Cristo en las vidas silenciadas.

Ahora en la Navidad presente, de una tregua se habla, no sería la primera en la historia, ya antes se verificara. En el asedio de Breda, cuando católicos y protestantes se enfrentaran, se conseguiría también al menos, dos felices días de gracia. Después de un mundial de futbol, que a la navidad se acercara, consiguiera entonces que un recuerdo precioso evocara, aquella tregua de invierno, que presuntos enemigos hermanara, jugarían juntos al futbol, y «Noche de Paz» se cantara. Conmociona la historia, cuando las treguas se alcanzan, es de lamentar que tan buen propósito, nunca perseverara. Solo queda afianzar el propósito de la paz y así la sangre en la tierra no clama. Si se diera hoy la tregua, en Navidad esperada, sería esperanzador, que la Navidad se extienda en su data.

Trabajos citados

Kraybill, J. N. (27 de febrero de 2022). CMM. Recuperado el 27 de febrero de 2022, de CMM.

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